Noches sin lunas, días sin soles
baldosas flojas, caminos bifurcados
que se entrecruzan y se abandonan.
Se enciende el umbral del ocaso
con abundancia de grises pálidos.
La distancia es enemiga íntima
y otras veces la mejor aliada.
Los silencios invaden cada hueco
y otras veces la mejor aliada.
Los silencios invaden cada hueco
adueñándose del aire
recubriendo las sombras
aturdiendo a la conciencia.
Lo ignoto atrae a las ausencias
que tropiezan con las baldosas
adoquines mal acomodados
pavimento indolente
huellas pisoteadas
huellas pisoteadas
surcos ya sin rastros.
Escombros removidos
entre vestigios perdidos.
Escándalo en el cielo
nubes que se exilian
revolución en el limbo.
Here comes the sun...